¿Correr en cinta o correr en la calle?
Una de las preguntas más frecuentes en el mundo del running es: ¿correr por carretera o en cinta? Ambas opciones tienen partidarios y detractores. Tus propios objetivos, gustos y situaciones determinarán en gran medida por cuál de las dos te decides.
Conocer las ventajas e inconvenientes de cada modalidad te permitirá hacer una elección acertada, tanto si tus objetivos son mejorar el rendimiento, perder peso o simplemente disfrutar de la actividad.
Beneficios de correr al aire libre
Correr al aire libre es una de las actividades más accesibles y gratificantes que podemos incorporar a nuestra rutina diaria. Al estar en contacto con la naturaleza aporta múltiples beneficios.
Mejora la salud mental
Correr al aire libre tiene un impacto positivo en tu salud mental. La luz natural, el aire fresco y los cambios de entorno alivian el estrés y la ansiedad. Correr en la naturaleza genera endorfinas, a veces denominadas hormonas de la felicidad, que mejoran el estado de ánimo y contribuyen a la relajación y el pensamiento positivo.
Además, el hecho de desconectar de las pantallas, así como salir del horario habitual, te puede ayudar a sentirte libre y mentalmente despejado.
Variedad de terreno
Otro de los beneficios al correr al aire libre se trata del paisaje con el que te puedes encontrar. Desde senderos de montaña hasta caminos de tierra, la variedad del terreno hace que tus carreras sean más emocionantes, y ayuda a entrenar varios grupos musculares.
Cada zancada se adapta a las irregularidades del terreno, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de lesiones a largo plazo. Esta diversidad te ayuda a mejorar el equilibrio y la coordinación.
Desafíos naturales
Los obstáculos naturales que se encuentran en el entorno al aire libre pueden aumentar tu fuerza física y tu resistencia. Correr contra el viento, subir cuestas o adaptarse a variaciones meteorológicas repentinas ponen a prueba tu capacidad para superar retos y te preparan para las malas condiciones.
Estos componentes no solo aumentan tu resistencia, sino que también hacen que cada carrera sea diferente y te inspiran para seguir mejorando.
Beneficios de correr en cinta
Correr en la cinta también ofrece una serie de beneficios significativos tanto para la salud física como mental.
Menor impacto en las articulaciones
Correr en una cinta tiene varias ventajas, entre las que destaca una superficie más blanda y amortiguada que el asfalto o el hormigón. Esto reduce el impacto sobre las articulaciones, lo que resulta especialmente útil si tienes problemas articulares o te estás recuperando.
La cinta de correr te permite entrenar con más seguridad al absorber parte de la tensión del footing y, por tanto, reduce las posibilidades de sufrir lesiones.
Facilidad para medir el progreso
La cinta de correr moderna dispone de tecnología que te permite realizar un seguimiento preciso de tu mejora. Ver el panel de control sirve para controlar el ritmo, medir la distancia recorrida, el tiempo y las calorías quemadas.
Esta función de seguimiento proporciona un gran instrumento para organizar y modificar sus ejercicios en función de sus propios objetivos. Además, las cintas de correr te permiten reproducir cuestas y descensos, lo que permite un ejercicio más concentrado y bajo control.
Principales equivalencias entre correr en la cinta y
en la calle
Aunque correr en cinta o al aire libre parecen actividades muy diferentes, en realidad comparten muchas similitudes en cuanto a los beneficios para la salud y el entrenamiento.
Ritmo de carrera
Correr en cinta o en la calle te permite mantener una velocidad constante. Ideal para ciertas sesiones de ritmo, en la cinta de correr puede elegir una velocidad y seguirla durante todo el entrenamiento.
Correr por la calle, en cambio, te ayuda a gestionar tu ritmo de forma más natural, a adaptarte al terreno y a la temperatura. Ambas modalidades te ayudarán a encontrar un ritmo vital para cualquier corredor.
Variabilidad del esfuerzo
Puedes modificar la intensidad del entrenamiento para adaptarla a tus necesidades, sea cual sea la modalidad por la que te decidas. Mientras que al aire libre las variaciones del terreno y del tiempo proporcionan una variación natural, en la cinta de correr puedes ajustar la pendiente o el ritmo para mejorar tu esfuerzo.
El secreto está en prestar atención a tu cuerpo y cambiar el reto en función de tu nivel de forma física actual.
Mejora cardiovascular
Ambos tipos de carrera son bastante eficaces para mejorar tu condición cardiovascular. Ya sea correr en cinta o al aire libre, aumenta el ritmo cardíaco, fortalece el corazón y mejora la circulación sanguínea, reduciendo así el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Mantener la constancia en los entrenamientos te ayudará a optimizar estas ventajas.
Consejos para elegir la mejor forma de correr según tus objetivos
Estos consejos te pueden ayudar a determinar si te resulta mejor correr en cinta o al aire libre, según tus objetivos a alcanzar.
Para mejorar resistencia
Si desea aumentar la resistencia, piense en mezclar ambas modalidades. Utiliza la cinta de correr para carreras largas que te permitan acumular kilómetros con regularidad y para entrenamientos a ritmo controlado.
Correr al aire libre, especialmente en terrenos variados, puede poner a prueba tus habilidades y aumentar tu resistencia mediante retos.
Para perder peso
Una técnica excelente para quemar calorías y perder peso es correr. Las sesiones de alta intensidad en la cinta de correr pueden ser muy eficaces si desea perder peso. Por ejemplo, los sprints o los intervalos. Al aire libre, añadir cuestas o terrenos difíciles potenciará la quema de calorías.
El secreto está en mantener una velocidad constante y asegurarte de que cada sesión suponga un reto.
Para la recuperación de lesiones
Debido a su menor impacto, la cinta de correr puede ser tu mejor aliada mientras te recuperas de una lesión. Empieza con sesiones cortas que se centren en la técnica y el fortalecimiento muscular lento de las zonas afectadas.
Antes de iniciar cualquier ejercicio físico es importante acudir siempre a un experto sanitario. Piensa en correr al aire libre solo cuando estés totalmente recuperado.
Recomendaciones para corredores principiantes
Si estás considerando o has comenzado a correr para mejorar tu salud física y mental, puedes seguir estas recomendaciones.
Cómo empezar a correr en cinta
Empiece a correr en cinta en sesiones cortas a una velocidad razonable para empezar a andar. Haz hincapié en mantener una postura correcta y una zancada natural. A medida que te vayas sintiendo más cómodo, amplía progresivamente el tiempo y la intensidad. Para evitar lesiones, recuerda estirar después de cada entrenamiento y calentar antes.
Cómo adaptarse a correr al aire libre
Si quieres empezar a correr al aire libre, elige caminos conocidos y seguros para tus primeras carreras. Comience con distancias pequeñas y vaya aumentando gradualmente la complejidad y longitud del terreno. Ropa adecuada a la temperatura y unas zapatillas de correr te ayudarán a disfrutar plenamente de la prueba.
Lo principal es que te guste el proceso. Sea cual sea la modalidad que utilices, correr en cinta o al aire libre, lo importante es que se ajuste a tus objetivos y a tu forma de vida.
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